Salen a la luz imágenes que muestran a la congresista peruana Lucinda Vásquez mientras uno de sus asesores le corta las uñas de los pies en su despacho parlamentario.
El hecho, revelado por el programa Cuarto Poder, generó indignación en Perú y llevó al presidente del Congreso, Fernando Rospigliosi, a pedir que la parlamentaria sea sancionada por la Comisión de Ética.
En la fotografía, Vásquez aparece hablando por teléfono mientras su asesor —y sobrino nieto— Edward Rengifo, identificado con su credencial oficial del Congreso, realiza la inusual tarea en pleno horario laboral.
Consultada por la prensa, la legisladora respondió: “No pido, no obligo a nadie, tampoco es voluntario”.
El caso se suma a otras denuncias por contrataciones irregulares y presuntos cobros ilegales a sus asesores, lo que agrava la crisis de credibilidad del Parlamento peruano, ya fuertemente cuestionado por la ciudadanía.





